Historia del Tesoro Imperial de Viena
La historia del Tesoro Imperial de Viena es un fascinante relato de conservación, desplazamiento y restauración. Todo comenzó en 1556, cuando Jacopo Strada, anticuario de la corte de Fernando I, inició la formación de las colecciones del tesoro. Sin embargo, fue en el siglo XVIII, bajo el reinado de María Teresa, cuando los tesoros de los Habsburgo llegaron a su ubicación actual dentro del tesoro. Este traslado ocultó hábilmente las tensiones financieras que había sufrido la dinastía debido a las costosas guerras contra la rival Prusia.
La Regalia Imperial, que llegó hacia 1800, encierra su propio capítulo de intrigas. Conservadas en Núremberg desde 1424, fueron trasladadas a Viena para protegerlas del avance de las tropas francesas de Napoleón durante los últimos días del Sacro Imperio Romano Germánico. Sin embargo, las autoridades nazis se llevaron los tesoros a Núremberg tras el Anschluss austriaco de 1938. Las fuerzas estadounidenses no las devolvieron a Viena hasta el final de la Segunda Guerra Mundial.
En 1983-1987, una renovación integral transformó la exposición, garantizando que el legado del Tesoro Imperial de Viena perdure como testimonio de la rica historia y patrimonio cultural de Austria y de la dinastía de los Habsburgo. Se abrió al público en 1954.